Cartago fue fundada en  9 de agosto de 1540 por el mariscal Jorge Robledo con un pequeño grupo de familias españolas y los habitantes de la región en los terrenos que hoy ocupa la ciudad de Pereira entre los ríos Otún y Consota. Este sitio era parte del territorio donde tenía su asentamiento la tribu indígena de los Quimbayas, gente pacífica y amigable, experta en la orfebrería, bastante rica en oro y en el conocimiento de este precioso metal. En la región gobernaban unos 80 caciques esparcidos a lo largo y ancho de su superficie.

68 años después de la fundación de la ciudad, en 1608 la Virgen María se apareció de manera prodigiosa en un lienzo sucio y roto que se utilizaba para limpiar los vasos sagrados y demás elementos del convento franciscano y que María Ramos una humilde mujer de 37 años de edad que trabajaba como aseadora en dicho convento estaba lavando en la orillas del rio Otún, grande fue su sorpresa cuando vio que en el lienzo fue apareciendo la imagen borrosa de nuestra señora como si allí hubiera habido antes una pintura de la virgen, admirada de semejante acontecimiento.

María Ramos, acudió presurosa al convento de los franciscanos, a contarle lo sucedido a Fray Fernando Macías Escobar quien era el padre guardián en ese entonces, este no le dio mayor importancia ni credibilidad al suceso, sin embargo, le aconsejó que extendiera el lienzo en un bastidor de cañas y que lo conservara en su casa en un lugar decente, los vecinos, iban a visitar dicha imagen de la virgen que poco a poco se fue haciendo más nítida y colorida, terminaron venerándola, la fe de los cartagüeños en la Virgen aparecida creo de tal manera que el padre guardián ordenó el traslado de la imagen al templo del convento para que estuviera expuesta permanentemente al culto público, con el correr del tiempo, los rotos del lienzo se fueron cerrando por sí mismo, y el cuadro todo se fue recomponiendo milagrosamente, ante semejante prodigio, los habitantes de Cartago, proclamaron a nuestra señora de la pobreza, patrona de la ciudad, título que conserva hasta hoy desde entonces se hicieron sus más fieles devotos y los más grandes promotores de su devoción.

El 21 de abril de 1691 Cartago se trasladó oficialmente a la región de las sabanas lugar que actualmente ocupa, debido entre otras causas a los continuos ataques con que los indios pijaos hostigaban a sus habitantes, en esa fecha, los cartagüeños trajeron procesionalmente la imagen de Nuestra Señora de La Pobreza junto a las puertas ventanas, muebles, enseres y demás objetos que les pertenecían, también portaron con devoción la imagen de Nuestra Señora de la Paz que fue un regalo que el rey Felipe III le hizo a la ciudad de Cartago en el año 1602.

La imagen de nuestra señora de la pobreza recibe el desfile y la entrada al lugar de las sabanas, seguramente bordeando la margen izquierda del rio la vieja hasta la nueva edificación del convento de San Antonio donde quedó colocada en lugar visible en el recién construido templo franciscano que todavía en 1693 estaba sin puertas ni ventanas ni otros reparos necesarios para el culto divino, en 1803 el doctor Manuel Antonio del Campo y Rivas personaje oriundo de Cartago y quien ocupó importantes cargos en el consejo de su majestad como oidor y alcalde del crimen de audiencia y cancillería real en el reino de Guatemala y subdecano de la Real Audiencia de Guadalajara en el actual México publicó un hermoso libro que quiso fuera no solamente el cumplimiento de un voto personal sino también el retrato vivo de la imagen de Nuestra Señora de La Pobreza con el fin de darla a conocer para su veneración en el mundo entero, estando don Manuel Antonio del Campo y Rivas recibiendo en la corte de Madrid España entre 1785 y 1793 hizo imprimir estampas de la Virgen de La Pobreza de acuerdo a un retrato que adquirió el Eminentísimo Señor Cardenal Lorenzana Arzobispo Primado de Toledo les concedió 80 días de indulgencia plenaria a las personas que rezaran un (1) Ave María delante de una de esas estampas, hasta hace poco fue costumbre en Cartago que la gente colocara a la imagen de la Virgen una estrella de oro como agradecimiento por cada favor o milagro recibido, esta tradición se prohibió por parte de las autoridades eclesiásticas locales a insinuación de una experta restauradora con el fin de conservar el lienzo 4 veces centenario.

La Virgen de La Pobreza también es la patrona de Pereira en el departamento de Risaralda. En 1863 recién fundada la aldea sus habitantes muchos de ellos oriundos de Cartago, la proclamaron su patrona y le consagraron su primer templo, hoy en día la Catedral de La Diócesis de Pereira, es el templo de la parroquia de Nuestra Señora de La Pobreza allí se celebra su fiesta el 7 de octubre de cada año fecha en que la iglesia conmemora a Nuestra Señora del Rosario, en la catedral de Pereira se conserva un óleo de Nuestra Señora de La Pobreza pintado en el siglo XIX por el artista cartagüeño Joaquín Jaime Santibáñez.

Nuestra Señora de la Pobreza es además la patrona de Tadó municipio del Chocó los padres franciscanos residentes en el municipio de Cartago que tenían a su cargo la evangelización de esta región y los Cartagueños que tenían sus minas y propiedades en territorio chocoano, seguramente implantaron allá la devoción de su virgen tutelar, la catedral de Tadó es una obra arquitectónica elevada a la categoría de monumento nacional; se conserva un hermoso cuadro de Nuestra Señora de La Pobreza. En este municipio chocoano celebran su novena y fiesta del 30 de agosto al 8 de sept de cada año desbordándose en manifestaciones de espontánea fidelidad y regocijo colectivo.

El lienzo con la imagen original de Nuestra Señora de La Pobreza se conserva y se venera aún en el templo de San Francisco en La Parroquia De Nuestra Señora de La Pobreza de Cartago Valle Colombia. Parroquia que fue creada el 1ro de enero de 1925 por el entonces obispo de Cali excelentísimo Señor Eladio Pelarza, su novena y fiesta se celebran con gran pompa y solemnidad del 30 de Agosto al 8 de Septiembre de cada año. El templo de San Francisco fue construido el 22 de Febrero de 1786.